Una gran manera de conocer Brooklyn es tomando un Brooklyn Loop, una opción de los recorridos turísticos en autobuses de dos pisos.
Ya que es la ciudad más grande y poblada de los Estados Unidos, la ciudad de Nueva York es más que Times Square y el edificio Empire State; por difícil que sea de creer, existe la vida más allá de Manhattan. De hecho, la ciudad se divide en cinco segmentos, en inglés se les llama “boroughs” (en español serían distritos, municipalidades o condados), y cada uno tiene su propia historia única. Y a pesar de ser el más popular, Manhattan es sólo uno de esos cinco. Los cuatro restantes en realidad son todos más grandes que Manhattan, y cada uno añade su particular significado a la cultura de Nueva York.
Tenemos a Queens, el más grande de todos, el orgulloso hogar del ficticio (pero tan influyente como cualquier celebridad real) Spider-Man (el Hombre Araña) así como de New York Mets, que juegan en el Citi Field. También tenemos a Staten Island, el distrito más suburbano, con el transbordador que sirve de transporte para llegar allí y que ofrece un viaje con una de las mejores vistas del horizonte de la ciudad. El Bronx, el único distrito que incluye un artículo (el artículo definido The) en su nombre oficial, casa del histórico Zoológico del Bronx y el hermoso jardín público y centro cultural Wave Hill. Sin embargo, sólo un segmento de Nueva York posee las características esenciales que le permiten identificarse con Manhattan; el distrito más poblado de los cinco: Brooklyn.
Hogar de 2.5 millones de personas, Brooklyn rivaliza con Manhattan tanto en lugares emblemáticos culturales y estaciones de metro; de hecho, la mayoría de las líneas de tren de la ciudad fueron construidas para facilitar los viajes entre sí. Está lleno de maravillosos barrios, lugares divertidos por conocer y ciertos lugares fantásticos donde comer.
Una zona que contiene los tres es Brooklyn Heights, que se sitúa junto al puente de Brooklyn. Un lugar tanto para los visitantes que gustan de andar a pie como para quienes deseen degustar un trozo de la historia de Nueva York: la famosa Grimaldi’s Pizzeria es la segunda más antigua de la ciudad. Al día de hoy, compite con sus vecinos Ignazio’s y Juliana’s, y los tres rivalizan al año por la supremacía. Esta rivalidad se asegura de que el barrio produzca comida italiana de gran calidad y, junto con las exquisitas carnes de Peter Luger’s Steakhouse (y su salsa de carne que se distribuye a nivel nacional), que mantenga su clase gastronómica de mayor nivel, tanto para sus residentes como los visitantes.
El puente de Brooklyn es un lugar emblemático tan notable como cualquier estatua o rascacielos, habiendo figurado en obras de arte de Andy Warhol, obras de teatro de Arthur Miller y películas de Hollywood, y ofreciendo transporte gratuito entre Manhattan y Brooklyn para millones de personas diariamente. También es famoso por ser el único puente accesible para peatones y ciclistas, garantizándoles impresionantes vistas de ambos distritos.
Pizzas de gran calidad, el puente, y un sublime paseo debajo de éste —con vistas hacia el East River y el distrito financiero—: todo esto la da al barrio un significado particular, con una esencia propia de Brooklyn así como del resto de la gran Nueva York.
Sin embargo, el tamaño de la población de la ciudad nunca permitirá al puente de Brooklyn ser lo único que conecte a los condados, pues junto con los puentes de Manhattan y de Williamsburg, sus vecinos céntricos, entre todos conforman el B-M-W del transporte neoyorquino (el puente de Brooklyn, el puente de Manhattan, el puente de Williamsburg). Y lo que separa a los dos últimos del primero es la presencia de vías del metro, el continuo transitar, las 24 horas del día durante los 7 días de la semana, de alrededor de 1.5 millones de pasajeros que trabajan en la Gran Manzana. El puente de Manhattan transporta a los trenes B/D y N /Q, cada uno conectando a Brooklyn, a través del centro de Manhattan, con el Bronx y Queens, respectivamente. Cruzando barrios como Bensonhurst, Dyker Heights, Brighton Beach, Crown Heights, Sheepshead Bay y llegando hasta Coney Island, los trenes nunca carecen de personas de todos los confines del mundo. En un día cualquiera, la diversidad en un tren de Brooklyn es un reflejo de la de la ciudad entera. El metro es una parte tan importante de la vida y la cultura que las dos líneas de trenes que corren a lo largo del puente de Williamsburg —la J y la Z—comprenden el nombre del mundialmente famoso rapero Jay-Z, quien es oriundo de Bushwick, Brooklyn. Y aunque hoy en día los barrios a lo largo de estas líneas de tren —salvo Williamsburg, el centro de artistas hipsters— carecen de los atractivos llamativos que cautivan a las personas, el servicio es, como lo ha sido durante décadas, impecable.
Dicho lo cual, no obstante, casi todas las demás líneas de tren están en constante cambio y perfeccionamiento, siendo renovadas y actualizadas para que vayan a la misma velocidad del agitado afluente de la población y los trabajadores neoyorkinos. El más reciente de estos desarrollos fue la reparación mayor de las paradas 2/3 y 4/5 en Atlantic Avenue, con la ayuda de la empresa que compró los derechos de nombre de la estación, Barclays Bank. Ahora con el nombre de Atlantic Avenue – Barclays Center, conecta 9 líneas de tren, el Long Island Rail Road, y presta servicio a los millones que deseen asistir a un evento en el colosal Barclays Center, un complejo de entretenimiento con un estadio deportivo situado en la parte superior de la estación. Es la respuesta de Brooklyn al Madison Square Garden, cuya noche de apertura en el 2012 estuvo marcada por la actuación del oriundo de Brooklyn, Jay-Z.
El estadio es ahora el hogar de los New York Islanders y los Brooklyn Nets, y su consecuente afluencia de visitantes ayuda al barrio donde se sitúa, Prospect Heights, el mayor rival en popularidad de su vecino al oeste de mayor renombre: Park Slope.
El atributo más atractivo de Park Slope se encuentra en otro análogo de Brooklyn respecto a un lugar icónico de Manhattan: Prospect Park, a menudo referido como el Central Park de Brooklyn. Sin embargo, si bien los dos presentan similitudes en fama y entornos, Prospect Park es considerablemente más pequeño y notablemente más tranquilo. Los visitantes acuden a Manhattan y como regla, con ellos el Central Park se colma de una manera más notoria que su homólogo de Brooklyn, dejando que los residentes de Park Slope disfruten del parque casi a placer, y aún con mucho espacio disponible para todo el que quiera regocijarse en él. El barrio se destaca por tener tantas casas como edificios de apartamentos que dan hogar a unas 70,000 personas; numerosas escuelas locales de primer nivel (Berkeley-Carroll y John Jay son las más importantes); y cientos de iglesias y sinagogas. Entre todo esto no pasa desapercibido el hecho de que el barrio ha albergado a un bastante considerable porcentaje de celebridades y estrellas; estrellas ciertamente populares y consolidadas como Patrick Stewart, Steve Buscemi, Maggie Gylenhaal y el propio alcalde de Nueva York, Bill de Blasio. Con un poco de suerte, es posible toparse con cualquiera de ellos.
Por último, aunque no menos importante, se debe mencionar la valoración que en el 2010 la New York Magazine le da a Park Slope como el barrio más destacado de toda la ciudad. Pasar unas horas allí disipará cualquier duda o incredulidad, y bien confirmará dicha opinión. Es precisamente por eso que éste es el lugar ideal para visitar después de terminar un paseo por los supremos rascacielos de Manhattan, cuando a uno le dan ganas de cruzar el puente o tomar el tren hacia el distrito de casas e iglesias. En pocas palabras, Park Slope es la joya de la corona de Brooklyn, y Brooklyn en sí es el hermano más parecido pero menos reconocido de Manhattan, aunque igual de grandioso y cautivante.